Cuatro días después de haber sellado su boleto a semifinales tras la victoria 2-0 ante el FC Bayern Múnich en Atlanta, los Rouge et Bleu pusieron rumbo a Nueva York con un objetivo claro: conseguir su pase al acto final de la competición. Pero antes de eso, debían enfrentarse al Real Madrid CF. Sin poder contar con Willian Pacho y Lucas Hernandez, expulsados contra los bávaros y sancionados con dos partidos cada uno, Luis Enrique repitió el once inicial que había alineado ante los floridanos, con una zaga central compuesta por su capitán Marquinhos y Lucas Beraldo frente al arco defendido por Gianluigi Donnarumma. Achraf Hakimi y Nuno Mendes ocuparon los carriles, Vitinha, João Neves y Fabián Ruiz conformaron el trío del mediocampo, mientras que Désiré Doué y Khvicha Kvaratskhelia se ubicaron en las bandas para asistir a Ousmane Dembélé, quien regresaba al once titular.
París arrancó con fuerza, bajo la mirada de los 500 aficionados llegados desde la capital francesa y del Supporters Club de Nueva York. Kvaratskhelia lanzó la primera advertencia con un remate desviado (3’), y luego Ruiz (4’) y Mendes (5’) vieron cómo sus intentos eran desviados milagrosamente por Courtois. París arrancó incluso muy fuerte: Dembélé le robó el balón a Raúl Asencio dentro del área y logró asistir a Ruiz, quien abrió el marcador (1-0, 6’). París empezó incluso muy, muy fuerte, porque Dembélé presionó a Antonio Rüdiger, le quitó el balón y definió ante Courtois (2-0, 9’). Las oleadas parisinas se abalanzaban sobre el arco madridista y Hakimi vio cómo su disparo cruzado pasó a escasos centímetros del arco (20’).
Mendes le ganó el duelo a Vinicius Jr (21’) y Marquinhos a Kylian Mbappé (22’). ¿Momentos clave? Seguramente, ya que en el contraataque, Dembélé —una vez más— lanzó perfectamente a Hakimi por el carril derecho. El exjugador del Castilla asistió a Ruiz, quien, frente a sus compatriotas, se deshizo de la marca de Valverde y firmó un doblete, su tercer gol en la competición (3-0, 24’). Como al inicio del partido, Kvaratskhelia, Mendes y nuevamente Dembélé estuvieron muy cerca de marcar justo antes del descanso: el georgiano remató apenas desviado (40’), el portugués lanzó un misil que Courtois desvió (45’+2) y el francés picó el balón por debajo del travesaño, pero el belga lo desvió in extremis (45’+4).
Si el ritmo del encuentro iba a bajar ligeramente tras el descanso, especialmente debido al calor y a los 90 grados Fahrenheit (32 °C) en Nueva Jersey, Kvaratskhelia (57’) y Ramos (72’) se crearon oportunidades, pero dispararon desviados. Finalmente, fue este último quien, ante los ojos de los 77,542 espectadores presentes en East Rutherford, cerró el recital rojo y azul. Hakimi desbordó por la banda derecha, cambió el juego hacia Barcola, que asistió al portugués. De espaldas al arco, el número 9 marcó girando (4-0, 87’).
Cuatro días después de la victoria histórica contra el Bayern, Luis Enrique y sus hombres mostraban otro gigante europeo en su lista de conquistas y consiguieron con brillantez su pase a la final del torneo, donde se enfrentarán este domingo 13 de julio a las 21h (hora de Francia, 15h en Nueva Jersey) al Chelsea FC, también en el MetLife Stadium de East Rutherford.
